Majestuoso lugar que resalta... de entre la eterna primavera; por Dios colocado en la rivera, del mágico Atitlán que encanta. Rodeado de verde esperanza, custodiado por su volcán que descansa; abrigando una noble descendencia, maya Kaqchikel por excelencia. Lugar del tule significa el nombre, de este apasionante paisaje... orgullozo linaje color de cobre, que al rojo y blanco del loy, rinde homenaje. Engalanado de costumbres y tradiciones, que hacen el orgullo enaltecer, de los que ha visto nacer, esta tierra de bendiciones... Sus mujeres a mano tejen, sus bellos güipiles multicolores, que luego con orgullo lucen, provocando místicos amores... Sus hombres día a día, labran y cosechan su suelo, recibiendo de cada semilla, los regalos del Dios del cielo. Tierra del maíz y del café, lugar de paz y de fe... merecedor de la notas de ensueño; del mágico Amanecer Luqueño. Mágico rincón que ha cobijado, en sus llanos y templados regazos, victoriosos hijos que han logrado, alzar su nombre, junto con sus brazos. Escribo observando el lago hermoso... mientras sus aguas vienen y van, porque me
siento orgulloso, de mi pueblo ¡San Lucas Tolimán! Foto cortesía: Prof. Roberto Cuj
Majestuoso lugar que resalta... de entre la eterna primavera; por Dios colocado en la rivera, del mágico Atitlán que encanta. Rodeado de verde esperanza, custodiado por su volcán que descansa; abrigando una noble descendencia, maya Kaqchikel por excelencia. Lugar del tule significa el nombre, de este apasionante paisaje... orgullozo linaje color de cobre, que al rojo y blanco del loy, rinde homenaje. Engalanado de costumbres y tradiciones, que hacen el orgullo enaltecer, de los que ha visto nacer, esta tierra de bendiciones... Sus mujeres a mano tejen, sus bellos güipiles multicolores, que luego con orgullo lucen, provocando místicos amores... Sus hombres día a día, labran y cosechan su suelo, recibiendo de cada semilla, los regalos del Dios del cielo. Tierra del maíz y del café, lugar de paz y de fe... merecedor de la notas de ensueño; del mágico Amanecer Luqueño. Mágico rincón que ha cobijado, en sus llanos y templados regazos, victoriosos hijos que han logrado, alzar su nombre, junto con sus brazos. Escribo observando el lago hermoso... mientras sus aguas vienen y van, porque me
siento orgulloso, de mi pueblo ¡San Lucas Tolimán! Foto cortesía: Prof. Roberto Cuj
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